«No hay nada como tocar el libro, leerlo y sentirlo… no es lo mismo…» ¿cuántos de nosotros no hemos escuchado esto de más de una persona que habla mal de los libros electrónicos? Aún así, estos tienen muchas ventajas, como el hecho de que ocupan mucho menos espacio -¿prefieres un librero o un Kindle?- y de que te puedes librar de un problema de espalda si eres un médico cargando demasiado libros.

Aún así, también tienen sus bemoles, como el hecho de que estés atado a un lector y de que, en el improbable caso de que te quedes sin electricidad por un periodo largo de tiempo también te quedes sin libros. Además de el hecho de que un libro tal vez se te pueda caer, pero dudo mucho que un e-reader siga funcionando después de una caída considerable.

Entonces la gran pregunta es ¿son buenos o malos los e-readers? Quizás al final sólo sea una cuestión de costumbres, porque la estadística demuestra que la gente compra más libros cuando tienen un lector de e-books, algo que es lógico, porque en la mayoría de los casos son mucho más baratos.

Aquí la infografía de  GOOD y Column Five en el que se nota como en “usuarios pesados” el e-reader parece ser el rey.





La verdad con los nuevos lanzamientos de Amazon y sus nuevas versiones del Kindle -y el Kindle Fire- se antoja aún más comprar un lector de libros electrónicos. La verdad yo en el único caso en el que no lo usaría serían con comics, pero sólo por su valor como coleccionable. ¿Qué opinan ustedes? ¿Son old school o usan libros electrónicos?

Si no la ven bien, acá está la versión en grande en GOOD.